(De izquierda a derecha) Jason Rigsby, Joseph Warner Rigsby y Laura Rigsby pertenecen a la Parroquia San José en Bowling Green. Laura, quien es especialista en medios digitales de la Diócesis de Owensboro, atribuye su camino hacia la Iglesia Católica a la intercesión de San José. FOTO POR CORTESÍA DE ELIZABETH CLARKE DONOGHUE
San José abrió el camino hacia la plena comunión en la Iglesia Católica
POR LAURA RIGSBY, OFICINA DE COMUNICACIONES
Había una vez un hombre llamado José. Estaba comprometido con la mujer (literalmente) perfecta, María, que de repente quedó embarazada. Un ángel se le apareció a José y le explicó que el hijo de María era el Hijo de Dios y que a José se le había confiado su cuidado. Aceptó valientemente y se convirtió en el protector de la Sagrada Familia como lo conocemos hoy. Aunque su muerte no está escrita en las Escrituras, es justo suponer que dejó su vida terrenal bajo el cuidado de Jesús y María. Pero su historia no termina ahí. Él sigue siendo un protector, padre y guía para todos nosotros, y Dios todavía lo está usando (y a todos los santos, de hecho) para guiarnos hacia Él.
Seguimos adelantes hasta el año 2014. Una joven Laura está completando una pasantía en Amarillo, Texas. Su pretendiente guapo de Kentucky ha venido a visitarla y juntos han viajado a San Antonio para ver El Álamo. Ambos disfrutan visitar sitios históricos, por lo que deciden ver también las otras misiones españolas en el área.
Su última parada sigue siendo una parroquia activa que acababa de comenzar su Misa de vigilia del sábado. Jason sugiere que esta iglesia histórica sería un lugar increíble para que Laura experimente su primera Misa ya que ha estado haciendo preguntas al respecto últimamente. Una vez dentro, Laura observa el ambiente y escucha las hermosas oraciones. Sus ojos descansan en el tabernáculo, sin saber lo que hay adentro, pero sintiéndose atraída de todos modos. ¿Cuál es esa sensación de ardor que nota en su corazón? Inexplicablemente, la experiencia le hace llorar. Se da cuenta de que esta no es una iglesia cualquiera.
Laura finalmente regresa a Kentucky y comienza a asistir a Misa con Jason. Cada vez siente más curiosidad por la Eucaristía. ¿Por qué solo los católicos pueden recibirla? ¿Por qué hay tanto ponerse de rodillas e inclinarse? ¡Es casi como si la estuvieran adorando! En RICA se entera de que de hecho la adoran, pero “esa” es en realidad “Él”, Aquel por quien somos redimidos, Aquel por quien la Misa tiene significado, Jesucristo. Laura entra en plena comunión con la Iglesia Católica en la Vigilia Pascual de 2016.
Yo soy Laura. Y creo plenamente que Dios envió a San José para llevarme a este encuentro con Cristo, y él me sigue guiando hasta hoy.
Comenzó con mi esposo (Jason, el pretendiente del cuento) que entró a la Iglesia Católica en la Parroquia San José en Bowling Green unos años antes de que nos conociéramos.
Yo también entré a la Iglesia en la misma Parroquia de San José.
Nos casamos en San José, nuestro bebé fue bautizado en San José, y su primer nombre es … lo adivinaron: José.
San José nunca ha dejado de interceder cuando le hemos pedido ayuda.
Aquí está mi parte favorita: aproximadamente un año después de que entré en la Iglesia, le conté a alguien mi historia y me di cuenta de que no tenía idea de cómo se llamaba esa parroquia en San Antonio. Soy millennial, así que lo busqué en Google. Misión San José. Fue San José todo el tiempo.
En este Año especial de San José declarado por el Papa Francisco, los animo a que busquen a San José como su guía. Pídanle que los lleve al encuentro con Jesús. Él los llevará allí.
Laura Rigsby es la especialista en medios digitales de la Oficina de Comunicaciones de la Diócesis de Owensboro y con su familia pertenece a la Parroquia San José en Bowling Green.
Originalmente publicado en la edición de febrero de 2021 del Católico de Kentucky Occidental.